Es la ciencia dedicada al análisis de los océanos, por ende recibe el nombre de oceanografía. Sus expertos investigan los diversos fenómenos que ocurren de manera subacuática y trabajan con los diversos organismos que habitan en el mar.
Existen cuatro ramas principales de la oceanografía: oceanografía física, oceanografía biológica, oceanografía geológica y oceanografía química. Aunque es la primera la que nos interesa como navegantes, bueno es saber que estudian las otras ramas de esta ciencia ya que todos los procesos están interrelacionados.
Estudia los procesos físicos que ocurren en el mar, tales como la mezcla (difusión molecular y turbulenta de las propiedades del agua de mar), las corrientes, las mareas y el oleaje.
La Oceanografía Biológica, que no es lo mismo que la Biología marina, estudia todos los organismos marinos y su relación con el medio ambiente.
Estudia los procesos geológicos que afectan a los océanos.
Estudia la composición química del agua de mar.
Profundizando más en la que fija nuestro interés tras estas líneas comprenderéis el porqué un apartado para ello pues la comprensión y predicción de los procesos físicos que ocurren en el mar, tales como, las corrientes, las mareas y el oleaje, los procesos de intercambio de energía, su profunda relación con la meteorología, son vitales para el navegante. El mar es nuestro medio y como tal cuanto más conocimiento tengamos de su comportamiento, más disfrutaremos de el, mejor será nuestra toma de decisiones cuando estemos en el y mejoraremos nuestra seguridad.
El mar-océano y la atmósfera son dos fluidos denominados, por su extensión, geofísicos. Se estudia con la base metodológica de la dinámica de fluidos geofísicos. Así, las corrientes, oceánicas, litorales, de marea, las estructuras atmosféricas, ciclónicas y anticiclónicas, y los procesos a pequeña escala, son el resultado del equilibrio de fuerzas que se ejercen sobre el Océano, fundamentalmente las inducidas por la interacción atmósfera-océano, las gravitatorias y de rozamiento.